Hace exactamente treinta dos años que en varias partes del Estado de Chiapas, Mésico, anfitrión de miles de guatemaltecos, llegaban los primeros grupos de refugiados. En el año 1980 se hablaba que entre mayo y noviembre habían llegado unos 331 refugiados. Fue el inicio de un éxodo que no se detendría hasta el año de 1984. En esta dirección, la presente investigación, por un lado, dará cuenta del estado de la cuestión sobre las investigaciones realizadas en torno al refugio guatemalteco y señalará los distintos enfoques disciplinares que se han desarrollado para entender la realidad de los refugiados guatemaltecos que buscaron sobre todo refugio en México; por el otro lado, planteará escenarios de la reintegración definitiva de esta población tanto en Guatemala como en México. Este exilio fue masivo y con características nuevas: poblaciones principalmente de origen maya, un fuerte componente de mujeres, niños y ancianos atravesaron la frontera mexicana, muchas veces sin darse cuenta, que huían de varios departamentos de Guatemala por las políticas de tierra arrasada y polos de desarrollo impulsadas por los gobiernos militares de ese país. Hay que señalar que el refugio guatemalteco fue muy rico en experiencias humanas y que permitió al Estado mexicano movilizar recursos, crear un marco normativo nuevo, formar varias generaciones de servidores públicos en la acción humanitaria, despertó a la sociedad civil y la involucró en las soluciones duraderas, los refugiados se convirtieron en actores internacionales, los distintos gobiernos participaron en una diplomacia humanitaria para encontrar soluciones comunes a nivel internacional y a nivel centroamericano, se va a dar la íntima relación entre la realidad de los refugiados y los derechos humanos y la experiencia acumulada es fuente inagotable de memoria histórica. Otro aspecto también nuevo, al menos para el escenario latinoamericano, fue que los refugiados asentados en México consiguieron históricos acuerdos para su retorno a su país de origen en 1992 y, en los Acuerdos de Paz de 1996, uno de los temas convenidos fue precisamente la reinserción de las poblaciones desarraigadas por el conflicto armado que vivió Guatemala durante treinta y seis años. En este sentido, nuestra investigación dará cuenta de las peripecias del Acuerdo de 1992 y detallará el primer retorno colectivo y organizado como elemento decisivo para acelerar el proceso de paz en Guatemala, pues los primeros refugiados regresaban a zonas de conflicto armado.