El siguiente trabajo analiza, a partir de una perspectiva de género, cuál es el rol de los docentes en el proceso de construcción de conocimiento. Analizaremos puntualmente el caso del Bachillerato Popular Mocha Celis, situado en la Ciudad de Buenos Aires, destinado (sin ser excluyente) a las personas que conforman el colectivo trans (personas travestis, transexuales y transgéneros) y cómo a partir de sus experiencias personales construyen y comparten conocimiento. Articularemos esta experiencia teniendo en cuenta diferentes autores, entre ellos, Paulo Freire, Pablo Gentili y Henri Giroux. Buscaremos indagar en sus estudiantes cuáles fueron las experiencias que los fueron alejando del sistema educativo formal, para poder conocer cuales son algunas de las falencias de dicho sistema. Nuestro objetivo principal será el de rescatar el rol del docente durante este proceso. La tarea de formar en la heterogeneidad del aula es un nuevo desafío. Creemos que a partir de conceptos claves de la teoría de género se puede construir un conocimiento más enriquecedor y que, articulándose con las ideas de Freire, se puede lograr una nueva educación para la libertad, con el fin último de poder concebir una sociedad más justa y equitativa. No con más capitalismo sino con más educación. Consideramos que es fundamental la articulación entre Educación y Género (en tanto construcción cultural de las sexualidades) ya que la misma es constitutiva de las relaciones sociales que se encuentran mediadas por el poder heteronormativo que rige las escuelas desde su concepción de agente homogeneizante. La perspectiva de género es una opción política para poner en evidencia la posición de desigualdad y subordinación que sufren las personas LGTB en relación con las heterosexuales. Pero mediante esta perspectiva podemos ver y denunciar como desde la educación se busca construir y pensar las identidades sexuales desde una concepción de heterosexualidad normativa y obligatoria que excluye otras formas de sexualidad que no se adscriben a esa norma. Desde Mocha Celis se trabaja en la re-construcción de las identidades forjando de manera colectiva un mejor futuro para aquellas personas que fueron excluídos por el sistema. Consideramos que es necesario, para las nuevas generaciones, elaborar un nuevo curriculum en el cual se considere como eje principal la implementación de una nueva Educación Sexual Integral (ESI) para dar combate a la discriminación que se re-produce dentro del actual sistema.