La sociedad moderna y capitalista se ha adueñado de la naturaleza y ha convertido todo en bienes. El dominio sobre esta se ha visto reflejada en la utilización de los recursos naturales de una manera desmesurada, la explotación de dichos recursos ha producido problemas ambientales que han impactado socialmente y que a su vez, la sociedad civil se ha organizado para hacer resistencia ante esta situación: El veganismo, boicots a eventos de uso animal para recreación y/o deporte, creación de organizaciones en defensa del medio ambiente, son algunos de ejemplos de resistencia ecológica. La relación del hombre con la naturaleza se puede entender en cuatro etapas: temor, respeto, rompimiento y reconciliación. Partiendo del hecho de que la sociedad desde los años setenta, y la configuración de los nuevos movimientos sociales, ha tratado de reconciliarse con la naturaleza tras vislumbrar un mundo de carencias en el que sea imposible la vida, es necesario hablar del movimiento de liberación animal como uno de los pilares ideológicos, políticos y constitutivos de los movimientos ecologistas, en contra del capitalismo combatiendo a la sociedad moderna y capitalista que mira a los animales como objetos y que los condiciona al sufrimiento, la esclavitud y la explotación.