El ingreso a la universidad implica un encuentro (o desencuentro) con los conocimientos científicos, filosóficos o literarios propios de la carrera elegida; pero también con una cultura particular que requiere la apropiación de sus códigos, sus costumbres, sus lenguajes y lugares; lo cual implica un tiempo en el que se va conociendo y reconociendo esta nueva cultura, y en el que cada sujeto se va pensando a sí mismo como partícipe (o no) de la misma. En otras palabras, se trata de iniciarse en una alfabetización, que hemos de denominar alfabetización académica, propia y particular de cada ámbito disciplinario y de la que deberán apropiarse los alumnos en su nuevo trayecto de formación. Al mismo tiempo, las formas de apropiación por parte de los alumnos, y el éxito o fracaso en sus trayectos por la universidad, no se vinculan con factores “naturales” (como los “dones” y “talentos”) sino se trata de una construcción de la que participa la historia escolar, laboral y socio cultural de los alumnos. En este marco, y en clave de repensar la relación entre políticas de ingreso a la universidad y sus actores, el presente trabajo se propone, primeramente, realizar un recorrido por algunos enfoques que abordan la problemática del éxito y fracaso educativo. Y posteriormente, se analiza la estrategia de Ingreso a la Carrera de Ciencias de la Educación de la Universidad Nacional de La Plata que se propone un real acceso democrático a la Universidad, distanciándose de aquellas que proponen cursos nivelatorios o eliminatorios.