Tras la crisis de principio de este siglo existieron en Argentina importantes transformaciones en el rol del Estado. El campo de la salud mental no fue ajeno a este reposicionamiento estatal y se vio atravesado por intensos ¬¬¬¬¬¬¬debates que culminaron en la sanción de la Ley Nacional de Salud Mental (LNSM). El análisis desde un enfoque de políticas públicas sobre la postura adoptada por el Estado frente a esta problemática aporta al conocimiento de los principales rasgos estatales durante la década pasada, arroja luz sobre sus mecanismos de interacción con la sociedad civil y permite comprender desde una iniciativa estatal en torno a la salud mental las características de las políticas públicas implementadas durante la última década. En este trabajo me propongo abordar este nuevo posicionamiento del Estado de cara a la salud mental, anclando particularmente el análisis en el Órgano de Revisión Nacional creado por la LNSM, en tanto actor institucional emergente a cargo de promover la efectiva implementación de esta normativa. A partir de ello, mostraré cuáles han sido los principales obstáculos en la práctica y ejecución de la LNSM que, en definitiva, han impedido transformar hasta ahora la matriz institucional del sistema de atención de salud mental argentino inaugurado desde la dimensión legal.