Este trabajo explora los conflictos en torno a los procesos de planificación urbana en tres capitales centroamericanas: Guatemala, San José y San Salvador durante el período 2003-2018 como expresiones de las relaciones de poder entre los diversos agentes del campo de la planificación. Para ello, se retoma el enfoque del constructivismo estructural de matriz bourdeana a través de casos de estudio a profundidad en cada una de las ciudades. Esto permite identificar por un lado las condicionantes estructurales del campo y el margen de maniobra de los agentes individuales. Los conflictos se centran alrededor de tres ejes: el control de los recursos naturales, especialmente el aprovechamiento del suelo urbano; la regulación de las actividades económicas y la localización de las zonas residenciales, los cuales tienden a reproducir condiciones de desigualdad, exclusión y vulnerabilidad en el espacio urbano. Más allá de ser resultado de las condiciones locales, estas luchas por el espacio también apuntan hacia vinculaciones globales relacionadas con el papel de organismos multilaterales y la promoción de modelos urbanísticos. A pesar de lo anterior, se presta especial atención a los procesos de resistencia de comunidades y colectivos organizados y a la capacidad de agencia de los profesionales para enfrentar a, o negociar con, los poderes económicos y políticos dominantes en estas ciudades.