Los delitos no violentos relacionados con estupefacientes son la primera causa de detención de mujeres cis y trans en Argentina. Nos encontramos ante una población con características específicas y que merece ser analizada en detalle. Nos ocuparemos aquí de reflexionar sobre la situación de las mujeres trans y travestis como un grupo particularmente perjudicado por la aplicación de la Ley de Estupefacientes. En base a la experiencia en el Equipo Interdisciplinario de la Defensoría General de la CABA y a las fuentes consultadas, afirmamos que estamos ante una población vulnerable, con escaso o nulo acceso al derecho a la identidad, la educación, la salud, la vivienda digna y el mercado formal de trabajo. Se trata, en su mayoría, de personas que sufren o sufrieron discriminación y violencia por su identidad de género, cuya alternativa de generación de ingresos más relevante es la prostitución, el comercio ilegal o la economía de subsistencia y que, en tanto desarrollan su actividad en la vía pública y muchas veces sin poseer documentación o transitando una situación de irregularidad migratoria, están constantemente expuestas al (mal) trato de las fuerzas de seguridad y la criminalización. En la cadena del tráfico de estupefacientes, las mujeres trans y travestis se desempeñan con mayor frecuencia en los últimos eslabones. criminalización