Tres conceptos reconocidos en el mundo del trabajo están en la mesa de debate en la Argentina contemporánea. La idea de la representación, con sus componentes de legalidad y de legitimación, presenta una constante tensión entre la autonomización de las cúpulas y la homogeneización de los intereses. De aquí que en ciertos contextos, la representación comience a ser un problema y hasta se hable de su crisis. El concepto de revitalización sindical, que se ha vuelto polisémico en cierto modo, al intentar dar cuenta de una serie de acontecimientos que claramente marcan una transformación respecto de la última década neoliberal al menos en términos de visibilización de la acción de los sindicatos y de los trabajadores, pero que varían en su peso, amplitud, composición (participación), formato y efectos. Finalmente, lo que se intenta aquí es valorar los conceptos anteriores a partir de la potencialidad o efectivización de un proceso de subjetivación política de los trabajadores, con especial énfasis la conflictividad laboral y las prácticas político-sindicales. La propuesta es realizar un análisis conceptual para luego mostrar su anclaje en aspectos particulares del activismo sindical. Este trabajo está orientado desde una perspectiva crítica.