El presente trabajo aborda el modelo de policiamiento orientado hacia la comunidad que, a partir de la década de 1990, se transformó en el recomendado por muchos referentes teóricos y organismos internacionales, frente a la difusión de la cuestión de la (in)seguridad y al descrédito que sumía a la institución policial. A partir del análisis preliminar dos casos concretos de Brasil y Argentina –el Programa de Policía Comunitaria de São Paulo y el Cuerpo de Prevención Barrial de la Ciudad de Buenos Aires-, nos proponemos identificar algunas dificultades y desafíos que enfrentan este tipo de Programas al momento de su implementación. Para ello, el trabajo se vale de los análisis realizados sobre los modelos de policiamiento comunitario y reforma policial (Reiner, 2010; Bailey y Shearing, 1996; Bayley, 2010; Smulovitz, 2003, Savenije, 2010; Frühling, 2003; Bayley y Dammert, 2005; Aniyar de Castro, 2003), así como de reflexiones sobre lo que se entiende por comunidad (Crawford, 1998; Sozzo, 2008; Brogden y Shearing, 1993; Hobsbawm, 1994; Young, 2012). Partimos de la premisa de que en general en el plano discursivo se suele presentar al policiamiento comunitario como un cambio de modelo policial con efectos hacia dentro de la institución como hacia la comunidad en general pero que en la práctica los efectos sobre la (in)seguridad suelen ser acotados y que suelen reproducir prácticas de control social represivo tradicionales.