La violencia se convirtió en un fenómeno que afecta a hombres y mujeres, sin embargo no es del todo neutral. Más de la mitad de las víctimas son mujeres. En Argentina, al menos una mujer muere cada tres días como consecuencia de las agresiones de un miembro de su entorno. Los hechos corroboran que a lo largo de sus vidas, las mujeres sufrirán algún tipo de violencia, en la que la mayoría de los casos, la persona que comete el abuso es un miembro de su familia. Este trabajo está orientado hacia las representaciones sociales que se hacen los actores sobre las manifestaciones de violencia y los roles familiares. El hilo argumental se basó en describir las representaciones sociales sobre la violencia hacia las mujeres y comparar dichas representaciones según las perspectivas de cada género. Con una metodología de trabajo cualitativa, se profundizó sobre dichos objetivos, con la meta de indagar qué perspectiva tienen los actores sobre las diferencias de género, más específicamente en el ámbito familiar y qué carácter le otorgan a la violencia hacia las mujeres, si lo consideran un hecho particular o conciben a dicho fenómeno como un producto del sistema social más allá de los actores.