El proceso de constitución de las decisiones de inversión pública es explicado desde diversas perspectivas teóricas. En algunos casos este proceso es descripto con eje en el recorrido decisional y la argumentación que construye cada decisión a lo que se suma la concomitante y posterior decisión. En otros enfoques se postula que la elección es racional por lo que resulta necesario cuantificar beneficios y costos esperados, en cada momento, por el responsable de la decisión respectiva, asimilando la conducta de estos actores al patrón de comportamiento del homo económicus, proveniente del .enfoque neoclásico. En los gobiernos subnacionales, en Argentina, el proceso de ordenamiento y jerarquización de las propuestas de inversión exhibe un recorrido institucional donde participan numerosos actores cuyos objetivos pueden converger o divergir en algún grado e, incluso, resultar contradictorios. En este escenario, donde no existe un agente racional omnicomprensivo capaz de decidir a partir de un simple proceso de optimización, y donde los problemas son demasiados complejos para llegar a una solución eficiente, Majone (1975) recomienda reducir las alternativas de inversión a aquellas que satisfagan el criterio de lo factible. Por eso afirma “los fracasos de políticas así como la aparición de consecuencias no previstas, son signos fehacientes de que no se prestó debidamente atención a restricciones importantes en el momento de toma de decisiones, o de que cambiaron las condiciones limitantes.” En este marco teórico este trabajo se propone explorar, desde las percepciones de los trabajadores calificados del Sistema Provincial de Informática de la Provincia de Santa Fe, las principales causas de fracasos atribuibles a proyectos ejecutados en ese ámbito, con énfasis en la identificación de las denominadas restricciones –en el enfoque teórico citado- como así también en la presencia de procesos de diseño que incluyan criterios de racionalidad, acordes con el restante enfoque mencionado.