La crisis inmobiliaria ha afectado profundamente España dado que constituía uno de sus motores y uno de los sectores donde se habían creados más puestos de trabajo para inmigrantes extranjeros. En la actualidad, hay más de cuatro millones de personas sin empleo. Las personas pueden recibir las prestaciones de desempleo en los países de origen e invertir. El Gobierno español ha propuesto Planes de Retorno para países con los cuales tiene acuerdos internacionales para que los beneficios obtenidos en España puedan perdurar al volver al país de origen. Algunos planes comenzaron en el 2004, pero con la crisis tuvieron más trascendencia. Sin embargo, se puede considerar que estas políticas no han tenido suficiente aceptación. Los colectivos con más desempleados no optan por el retorno. Algunos grupos sudamericanos lo hacen, más que otros, pero nunca significativamente. En este artículo se evalúa el impacto de estas políticas. Las cifras de las personas que se han acogido a los planes son oficiales. También lo es una estimación del desempleo cuando se propusieron los planes, para algunas nacionalidades. Por otra parte y para poder interpretar las razones de la negativa, se ha realizado una encuesta cualitativa en algunos centros y ONG donde acuden los inmigrantes en busca de consejo. En esa medida, las razones dadas se apuntan como posibles y alternativas. Las personas no desean volver o muy pocas de ellas se deciden. Las diferencias entre las expectativas del Gobierno Español y la respuesta a los planes ha sido significativa.246