El presente trabajo se sitúa en un hecho puntual, ocurrido en Diciembre del año 2010 en Santiago de Chile: el incendio en la Cárcel de San Miguel, que causó la muerte de 81 presos. Este fenómeno, no sólo evidenció las condiciones inhumanas en las que conviven más de 50 mil personas en Chile, recluidas a lo largo de 95 penales, constatándose además la ausencia grave de un enfoque de derechos humanos en el sistema penal, sino que además, reveló como el modelo neoliberal, impuesto a fines de los años setenta con la dictadura militar, produce y reproduce sus lógicas de exclusión social e individualismo, asentando a la vez la indiferencia social ante los grupos humanos más desfavorecidos por este modelo de Sociedad. A través de constataciones manifestadas en diversos medios de comunicación, el incendio permitió mostrar cómo el Gobierno, las autoridades competentes y la sociedad civil responsabilizaron a los presos de este hecho y se 'alegraron' de que hubiese ocurrido. En este sentido, cabe preguntarse cuán instalada está la lógica del temor al 'otro' y el consiguiente énfasis en el tema securitario. En este contexto, esta ponencia se propone dialogar a partir del suceso señalado, sobre la situación penitenciaria chilena actual vinculada al modelo neoliberal y su influencia en la desidia política frente al estado del sistema carcelario, la instalación de políticas de seguridad pública referidas exclusivamente a este ámbito, y el peso que cobra la naturalización de la indolencia social frente a esta población.