En la búsqueda de una era de paz, los colombianos evidencian una nueva oportunidad para recomenzar, redefinir y reescribir el futuro. El poder vivir en esta época de transición es de gran privilegio y compromiso; sin embargo, se evidencia la presión de una ideología conservadora, que difícilmente a causa de su proceso de socialización, llegasen a aceptar un cambio tan anhelado para muchos y despreciados por otros. El objetivo principal consistió en evidenciar y orientar una reflexión sobre el proceso de transición de guerrilleros a excombatientes del Espacio Territorial de Capacitación y Reincorporación ETCR Urías Rondón, ubicado en el Departamento del Caquetá, Colombia, grupo que permitió evidenciar que la reincorporación ha sido, desde la firma definitiva de los acuerdos en 2016, un proceso trajinado y lleno de dudas, permeado por la inseguridad de dar a conocer una verdadera identidad, al igual que la polarización tan abismal que se vive desde un tiempo atrás al plebiscito, donde se demostró que más del 50% de los votos fueron rechazados. Entre tanto, los imaginarios sobre esta población de excombatientes, que buscan un nuevo rumbo para sus vidas, se demuestran transgredido por unos ciudadanos que muestran intenciones de erradicar por completo este grupo, que tiempo atrás estuvo al margen de la ley y actualmente lucha por estar en condiciones para ser parte de la sociedad, una búsqueda como los demás colombianos de obtener mejores condiciones y poder llegar a ser compatriotas dignos en un futuro.