En los presentes años se ha manifestado otra forma de vínculo entre la industria cultural y los fans, una expresión del amor y la devoción a un personaje: el amor Waifu o Husbando. Una Waifu es la exposición del vínculo entre un otaku, es decir fans de manga y anime, y su personaje femenino favorito (si el personaje es masculino el término es Husbando), manifestado bajo el consumo de todo el merchandising disponible. El fandom waifuista tiene un clivaje fuerte con la mediatización digital, y una apropiación de diversos apósitos tecnológicos, principalmente la pantalla. De este modo, al considerar la tecnología como socialmente construida y a lo social tecnológicamente construido ¿Podría analizarse a los fans del anime y el manga en general como un híbrido tecnosocial, que redefine –aún sin quererlo- las estructuras binarias propios de la modernidad: mente-cuerpo, hombre-mujer, humano- animal, naturaleza-cultura?