Las Comunidades Productivas Solidarias Argentinas tienen su origen en los comienzos de la década de los ochenta, a partir de las iniciativas llevadas adelante por la Asociación Civil Don Jaime De Nevares en colaboración con la Vicaría de Pastoral Social del Obispado de Quilmes. Esta organización pasó por varias transformaciones desde 1981 hasta que en la actualidad se plantearon lo que denominaron “la vuelta al campo”. Se propusieron generar una instancia de desarrollo territorial sustentable para la producción y el trabajo sostenido creando bienes agropecuarios que incorporen valor agregado a partir de integrar mano de obra desocupada disponible, instalaciones e infraestructura abandonadas y tierras en desuso. Esta propuesta implica la promoción de la agricultura de base familiar como eje del arraigo de las familias en el medio rural y así evitar el éxodo permanente de los jóvenes. Para este cometido se plantean el desarrollo de tecnologías sencillas (agrotecnias) no contaminantes y en función de la promoción humana. En el marco de lo anterior, esta ponencia se propone analizar el contexto y los fundamentos que dieron lugar a la transformación denominada “la vuelta al campo”.El abordaje metodológico es cualitativo: entrevistas a profundidad a los dirigentes y análisis documental.