El tema que propongo discutir en las Jornadas Interescuelas es el análisis de la actitud y la postura del Cabildo Eclesiástico de México frente ante uno de los acontecimientos que han sido considerados como antecedente fundamental del descontento que generó el movimiento de 1810: la Consolidación de Vales Reales, aplicada entre 1804 a 1808. La pertinencia de una investigación de esta naturaleza se hace patente si consideramos que la mayoría de los estudios que se han realizado sobre Consolidación de Vales Reales, se han enfocado en describir principalmente las consecuencias que dicha medida tuvo para los sectores productivos (agricultores, mineros y comerciantes) y en la economía novohispana en general. Sin embargo, son muy pocos los investigadores que se ocupan de analizar las repercusiones políticas y económicas de la Consolidación al interior de la Iglesia, lo cual constituye una carencia significativa. La falta de estudios que hablen sobre la reacción de las corporaciones eclesiásticas afectadas por la Consolidación de Vales Reales, parece dar por sentado que no existió tal reacción. En este sentido, la persistencia y generalización del argumento de un alto clero controlado por la doctrina regalista y el Patronato Real, ha contribuido a mantener la noción de un silencio absoluto ante los embates de la política borbónica, y de una total adhesión al bando peninsular en la crisis de 1808. Por este motivo, consideramos que será útil e interesante dar voz a la reacción del Cabildo Catedralicio Metropolitano, ante la medida que sería la culminación de una serie de ataques originados por la política reformadora y de tono secularizante aplicada por los Borbones. Las preguntas centrales que se plantea nuestro trabajo son: ¿cómo reaccionó el cuerpo capitular eclesiástico frente la Real Cédula de Consolidación?; ¿qué efectos políticos produjo al interior del cabildo?; ¿hubo escisiones al interior del cuerpo o se mantuvo uniforme en la decisión de la respuesta que se daría?; ¿cuál fue la actitud que asumió el cabildo catedral frente a su tradicional aliado y ahora atacante de los privilegios de la clase eclesiástica? Nuestra hipotesis sostiene que la reacción del Cabildo Eclesiástico, ante una medida como la Consolidación que afectaba tan directamente sus propios intereses, no pudo ser un absoluto silencio, sobre todo si tenemos en cuenta la composición mayoritariamente criolla del Cabildo Eclesiástico Metropolitano y la existencia de una estrecha red de relaciones y correspondencia de intereses entre capitulares y los grupos económicos más poderosos de la región comprendida por la Arquidiócesis de México.