En la estructura mundial de la sociedad de riesgo en la cual nos ubicamos actualmente, es posible analizar y exponer con casos concretos el impacto de la globalización y las empresas transnacionales en los territorios, haciendo evidente la intervención empresarial en los entornos naturales en búsqueda de la extracción de materias primas, este hecho es justificable bajo el discurso progresista utilizado para penetrar las sociedades rurales, pero se desconoce por parte de la comunidad las condiciones reales que implican estos proceso extractivos por lo que es de suma importancia ubicar esta problemática social en un contexto mundial y en una condición local especifica ya que esto permite que el desarrollo de las resistencias sea efectivo. Los factores más importantes que influyen en este objetivo son el conocimiento legislativo y empresarial como herramienta de protección territorial, el apoyo académico e investigativo para poder comunicar los saberes específicos contenidos de manera formal y la fuerte cohesión social. El proceso de resistencia lleva consigo un rescate de saberes tradicionales importantes que se encuentran con la identidad y las proyecciones sustentables para proponer una organización económica viable y responsable con el medio ambiente.