En Argentina, los programas de salud sexual y procreación responsable no discriminan entre mujeres heterosexuales y no exclusivamente heterosexuales de manera explícita. Pero la mayor parte de las políticas públicas se erigen desde el marco de la presunción de heterosexualidad reproductiva por cuanto se enfocan directa o indirectamente sobre la población de madres o potenciales madres en el marco de relaciones coitales heterosexuales (Brown, 2006; Pozzio, 2011). Resulta difícil, por lo tanto, saber cuál es la relación que mujeres lesbianas y bisexuales tienen o no con estos servicios y cuáles podrían ser las barreras o facilitadores que esta población encuentre para su acceso. A los fines de cubrir la mentada vacancia y aportar insumos para la formulación de políticas públicas integrales en salud, en la tesis de Maestría me propongo analizar las prácticas de cuidado de la salud sexual y reproductiva que las jóvenes lesbianas y bisexuales de 18 a 29 años de sectores medios socializan entre ellas y sus vínculos con los servicios de salud sexual y reproductiva del Área Metropolitana de Buenos Aires, a través de una metodología basada en la realización de entrevistas semi-estructuradas y la construcción de relatos biográficos.