El presente trabajo indaga las transformaciones de las que ha sido objeto el Estado Plurinacional de Bolivia en la última década, fundamentalmente desde la sanción de la nueva Constitución Política y la reforma del Régimen Electoral. Ambos instrumentos dan testimonio de un nuevo paradigma que pretende resignificar al Estado como una estructura propiciadora de espacios de debate plural que permiten reconocer y problematizar las identidades. En Bolivia se está desarrollando un proyecto que apela a desmonopolizar la etnicidad del Estado y a lograr que sistemas simbólicos, lingüísticos y de autoridad, desestimados e invisibilizados por siglos, puedan converger en un federalismo étnico que refleje la verdadera complejidad inherente al Estado. En la actualidad esta pulsión multicultural vislumbra nuevos horizontes en su lucha por ser reconocida, instaurando un nuevo sistema que se encuentra en las antípodas del Estado-nación moderno y excluyente: la plurinacionalidad. Asimismo, distintos regímenes políticos se han abocado a la búsqueda de la unidad a través del reconocimiento y legitimación de su diversidad cultural. Por ello proponemos recorrer este novedoso proceso integrador para poder preguntarnos: ¿Qué desafíos están afrontando estas prácticas? ¿Es posible transpolar el modelo boliviano a otros países o regiones?