En esta ponencia analizamos la experiencia del movimiento estudiantil cordobés durante los 4 años que separan al Cordobazo, en mayo de 1969, de la “primavera camporista”, en mayo de 1973. En este sentido, nos interesa ver la evolución de las formas de lucha, los modos de organización y las alianzas. Aquí destacamos que tras el Cordobazo el movimiento estudiantil mediterráneo recuperó mucho de la vitalidad perdida tras la derrota de 1966. Al mismo tiempo, localizamos sus momentos de mayor movilización durante las luchas por el ingreso irrestricto en 1970 y 1971. En este último caso, estas protestas prácticamente empalmaron con otro hecho de masas de primera importancia: el Viborazo de marzo de 1971. Por otra parte, a la vez que analizamos estos procesos de movilización, no dejamos de notar el crecimiento de la importancia de los reclamos académico – corporativos y de la lucha anti – represiva, ya durante la presidencia de Lanusse y el GAN. En el primer orden de cosas, es destacable que muchas de las confrontaciones por cuestiones académicas incluyeron importantes cuestionamientos de tipo pedagógico político; mientras que las segundas se abocaron a la resistencia frente a la acción de grupos armados de derecha y al accionar del mismo Estado.