Los gobiernos desarrollistas se enfrentaron con dos dilemas medulares: por un lado, la necesidad de definir las características del modo de acumulación, y por otro, la determinación de las bases sociales sobre las que se sostendría dicho modelo. Esto, implicaba decidir, no solo sobre el camino que debía tomar la industrialización después de la primera ISI, sino también, qué se debía hacer con el movimiento obrero que seguía adhiriendo fuertemente al peronismo. Por su parte, una fracción de la izquierda se manifestó al margen y en oposición a los partidos de izquierda tradicional, ya que estos habían apoyado abiertamente al golpe del `55. Este sector emergente, el cual denominaremos como la nueva izquierda marxista, intentó extirpar el error de las visiones tradicionales, e indagó desde una perspectiva diferente el significado del peronismo. Por otro lado, acontecimientos como la Revolución Cubana, generarían un acercamiento por parte del peronismo hacia algunos postulados de la izquierda, originándose así lo que denominaremos como izquierda nacional. En este contexto, la presente ponencia se propone reconstruir el debate entre las dos vertientes de la izquierda, en torno a la industrialización argentina y el rol del movimiento obrero, durante los gobiernos desarrollistas. Metodológicamente, se realizará un análisis discursivo de las producciones de H.Arregui, J.W.Cooke, Jauretche, y documentos de la CGT de los Argentinos, en tanto incorporan al marxismo aplicándolo a las especificidades nacionales y por otro lado, a los trabajos de Silvio Frondizi y Milcíades Peña, como representantes de la nueva izquierda marxista.