En este trabajo analizamos la formación de la colección arqueológica del Museo Pampeano de la localidad de Chascomús utilizando un enfoque biográfico. Buscamos superar una visión estática de los objetos y dar cuenta de sus transformaciones en el marco de relaciones sociales específicas. La construcción de significados y criterios de valor en torno a las colecciones es un proceso dinámico, situado y relacional en el que intervienen diferentes agentes sociales. En el período comprendido entre los años 1939 y 1992, marcamos la existencia de tres momentos en que se construyeron significados sobre los objetos de la actual colección arqueológica del Museo Pampeano. En estos momentos, los objetos fueron utilizados de diferente modo y con diversos objetivos, por agentes vinculados al museo (estudiosos del pasado local y funcionarios de la institución). En el contexto de relaciones institucionales e interpersonales que se fueron transformando con el transcurso del tiempo, el pasado prehispánico referido mediante los objetos arqueológicos, adquirió diferentes representaciones. El primer período remite a la fundación del Museo, y al modo en que dos colecciones arqueológicas privadas se hicieron públicas mediante su presentación en un Álbum conmemorativo de la localidad. Estas primeras publicaciones refieren a informes de recolección de materiales prehispánicos que datan del siglo XIX. Estas recolecciones están vinculadas con actividades de esparcimiento en las estancias de la zona por parte de agentes que participaban de redes comerciales e intelectuales más allá del contexto local. El segundo momento, se inicia en el año 1953, cuando se incluye un espacio expositivo para los materiales arqueológicos en el Museo Pampeano. El proceso de selección y exhibición de los objetos se vincula estrechamente con los estudios e interpretaciones que se realizan sobre los mismos. En estas primeras exposiciones, se situó en un mismo nivel objetos indígenas provenientes de distintos lugares y tiempos, construyendo una representación del pasado prehispánico como grupo cultural homogéneo y estático a lo largo del tiempo. Un tercer momento, se inicia con el reciclado del espacio expositivo producto del trabajo colaborativo de profesionales del museo y de la arqueología. En esta nueva propuesta, los objetos arqueológicos son utilizados para dar cuenta de diferentes procesos tecnológicos. Se establece una nueva imagen sobre las poblaciones prehispánicas, que resalta la diversidad de conductas interna. Estas perspectivas concuerdan con los marcos interpretativos comenzados a utilizar desde la década de 1980 en las investigaciones arqueológicas de la región pampeana.