La presente ponencia se propone analizar las características de los ciclos económicos y su interacción, en un cuadro de largo plazo de la historia misionera (1880-1990) La historia económica misionera es aún un gran capítulo pendiente. Las no muy profusas aproximaciones se focalizan en períodos acotados, que en la etapa moderna se concentran en la neocolonización, historia local, o estudios sectoriales –especialmente la yerba mate. La síntesis global es, casi por definición, una necesidad educativa y cultural antes que científica, y la profunda dispersión de las fuentes hace temer el abordar períodos prolongados… Nos propusimos entonces, con alguna cuota de audacia, integrar la evolución económica de Misiones, en un cuadro que permita trazar relaciones entre los problemas sectoriales y focalizados, con la macroeconomía argentina. En primera instancia revisamos la periodización de los 120 años transcurridos entre la federalización y la reinstalación del liberalismo a fines de la década de 1980. Reconocimos ocho etapas (4 del TNM y 4 de la provincia como tal), que cruzamos con 6 ejes de análisis: población, distribución de la tierra, infraestructura (red vial, energía, comunicaciones), estado-instituciones-políticas públicas, producción (incluyendo tecnología), mercado (precios relativos en los distintos rubros o sectores). Se reconoce una estructura caracterizada por una diversificación productiva, parcialmente alternada por “cultivos calientes”, con ciclos de auge y depresión cuya irregularidad no se relaciona exclusivamente con la intervención del estado –en sí mismo discontinuo-, sino con el juego de todos los factores, y los ciclos de otros rubros que el productor alternó, en una estrategia condicionada por la información no anticipada, el estado tardío y la cultura.. Ensayamos asimismo algunas aproximaciones teóricas no focalizadas, buscando reconocer su nivel de ajuste a un cuadro esencialmente periférico a los cambios políticos y macroeconómicos, aunque no por eso apartado de la lógica estructural.