El estudio de las sociedades del cercano oriente antiguo presenta una doble complejidad: su lejanía en el tiempo y su condición de “oriental”. En cuanto a la primera dificultad esta la presentan todos los hechos históricos de por sí, aunque el hecho de ser las sociedades del cercano oriente las primeras grandes civilizaciones en el mundo le confiere a su estudio una distancia temporal mayor que la que podría tener la investigación de otros sociedades. Es por este primer motivo que el tratamiento de sus fuentes históricas deberá ser cuidadoso en cuanto que probablemente se tenga menos en común con los hombres de la antigüedad de lo que se podría tener con los hombres de un pasado más cercano en el tiempo. La segunda dificultad reside en el hecho de ser las sociedades de cercano oriente precisamente orientales. Esto nos obliga a reconocer que nuestro carácter de occidentales presenta una limitación para entender muchos hechos que nos son ajenos, pues hablamos de dos cosmovisiones sino opuestas muy diferentes. Reconocer nuestra cualidad de extranjeros en el mundo oriental será el primer paso para iniciar un análisis serio. Una vez aclaradas estas dos complicaciones que presenta el estudio de oriente antiguo pasemos a hablar de la especificidad de nuestro caso: Egipto en época amarniana. Las fuentes egipcias que llegan hoy a nuestras manos serán mayormente estatales, puesto que el grueso de la población era iletrada. Pese a esto, el motivo principal es que existía todo un aparato de estado operando para que esta información llegue a nuestras manos, de lo contrario esto no habría sucedido. La existencia de fuentes de información bien conservadas tiene que ver con la intención trascendentalita que tenía el estado ya que buscaba mostrarse eterno. Por ultimo, trataremos detalladamente el uso de las fuentes en el periodo amarniano. El principal problema con el que nos topamos es los escasos monumentos y escritos que se conservaron de esa época pues, si durante la historia egipcia la intención fue trascender, la época de amarna fue una etapa que los sucesores de Akhetaton buscaron ocultar. Teniendo en cuenta esto, resaltamos la importancia de apoyarse en otras disciplinas que puedan completar la poca información con que contamos, esto es así para la historia egipcia en general pero más lo será para la historia amarniana en particular. Teniendo en cuenta las características especiales de la época, daremos cuenta de los límites y alcances del tratamiento de las fuentes históricas y arqueológicas para un análisis más rico de las estelas de la ciudad de Akhetatón en particular.