Teniendo en cuenta el inmenso arco que cubre la historia de carácter cultural, este trabajo se enfocará en uno de los temas menos visitados y sin embargo de los más importantes de la cultura estadounidense: el denominado “comic” en especial el de superhéroes. Se realizará, entonces, un estudio comparado de dos obras completamente trascendentales del comic moderno: “Watchmen” de Alan Moore y Dave Gibbons y “Batman: Return of the Dark Knight” de Frank Miller. Ambas son las representantes de la ruptura del noveno arte tanto en los Estados Unidos como en todo el mundo, principalmente en cuanto al género principal de este país: los superhéroes. El análisis de estas obras lejos está, sin embargo, de enmarcarse dentro del estudio de este campo únicamente, si no que, más bien se plantea un estudio desde el contexto de los Estados Unidos. Ambas obras son publicadas a mediados de la década de los ochenta, en pleno momento de las medidas en respuesta de la crisis de los años anteriores tal como lo marcan las posiciones de Pablo Pozzi y Fabio Nigra. Este contexto se presentó con múltiples conflictos dentro de la sociedad y hacia la situación mundial. Ambas historietas los reflejan, y proyectan una imagen que no solo representa a la visión de sus autores si no que, mucho más, se vinculan con la apropiación de los espectadores, lejos de lo que Walter Benjamin llama “aura” de una obra artística. Las mismas, a pesar de pertenecer a un genero que muy lejos esta de reflejar un mundo real de estos espectadores, son completamente novedosas en su intento de acercar el mismo a un realismo que genera un efecto en donde múltiples aspectos de la sociedad norteamericana aparecen con una carga mucho mayor que precedentes en este arte: La segunda escalada armamentística de la guerra fría, la justificación de las intervenciones mundiales de los Estados Unidos, el destino manifiesto, el sobrepaso al denominado “Síndrome Vietnam”, la añoranza del pasado creado de los gloriosos años del capitalismo y una incipiente necesidad del “fin de la historia”. Todos estos tópicos nombrados no solo permiten una asimilación exitosa de la obra en la sociedad de los Estados Unidos, si no que generan que estas obras sean un vehículo de una ideología imperial que necesita replantearse frente a esta gran crisis.