Desde la década de 1870 a la coyuntura favorable para la formación de un mercado nacional de consumo de vino, se sumó el apoyo del Estado con la promoción del modelo vitivinícola por medio de políticas específicas. El viñedo fue elegido por la élite provincial como una alternativa viable y rápida para superar la crisis de todo el comercio en la región. El Estado provincial, con apoyo del nacional, promovió el paso de la vitivinicultura tradicional a la moderna. Entre las principales políticas implementadas por el gobierno provincial encontramos la exención de impuestos, la organización del sistema de riego a través de la legislación y creación de organismos específicos de control, realización de estudios técnicos, financiación de obras de infraestructura e irrigación, concesiones de agua para riego; mensura y venta de tierras públicas; desarrollo técnico y fomento agrícola, oferta de crédito, formación de recursos humanos y la búsqueda de mano de obra mediante el fomento de la inmigración, entre otras medidas. La exención de impuestos a los terrenos cultivados con vid con criterios modernos fue establecida mediante las leyes promulgadas en 1881, 1889, 1895 y 1902. Estas leyes de promoción de la vitivinicultura desataron un proceso de modernización donde la vid ocupó nuevas tierras y, en ocasiones, sustituyó a otros cultivos en el Sur provincial. Richard-Jorba afirma que “esta política fiscal fue la más exitosa de todas y de impacto inmediato y duradero a la vez, como que el modelo sigue parcialmente vigente hoy, aunque en proceso rápido de reconversión”. En este trabajo intentaremos establecer los alcances de la política de promoción del viñedo llevada a cabo por el Estado provincial en el departamento San Rafael. Por un lado, determinando la magnitud del impacto de esta política en el aumento de la superficie cultivada con vid entre 1889 y 1902. Por el otro, identificando a los beneficiarios de las mismas. Para lograr este objetivo utilizaremos como fuentes de información los decretos de exención de impuestos publicados en el Registro Oficial, las estadísticas oficiales sobre la evolución de la superficie cultivada en el departamento de San Rafael, y las escrituras registradas en los protocolos notariales.