Atención

Búsqueda avanzada
Buscar en:   Desde:
La representación del espacio nobiliario en el mundo renacentista: cambios y permanencias
Carrizo y Walter José.
XIV Jornadas Interescuelas/Departamentos de Historia. Departamento de Historia de la Facultad de Filosofía y Letras. Universidad Nacional de Cuyo, Mendoza, 2013.
  ARK: https://n2t.net/ark:/13683/eMCw/BX1
Resumen
Hacia fines de la Edad Media, el orden de los bellatores, cuya representación mental más efectiva corresponde a la figura tradicional del caballero, comenzó a ser cuestionado en forma sustancial. Ello se debía, en gran parte, a la caída de la hegemonía que ostentaba, como elemento decisorio, en los campos de batalla, situación que ponía en tela de juicio a la actividad específica para la que había sido concebido: la guerra. Con los primeros disparos de arcabuz, y la generalización en los ejércitos reales de apretados cuadros de infantes armados con picas, la caballería, al retroceder en el plano de lo militar, instrumentó todo un conjunto de mecanismos culturales tendientes a mantener la primacía social de la elite guerrera nobiliaria, a pesar de la pérdida de su raison d’être primigenia. Entre los intelectuales que repensaron al caballero, con el fin de construir una nueva figura social más acorde al nuevo contexto renacentista, se destacó Baldassare Castiglione, noble italiano autor del famoso tratado “Il Cortegiano” (El Cortesano), obra capital de la Italia renacentista que instituye al cortesano, construido en torno a la resignificación de la cortesía ya presente en las cortes medievales, como nuevo arquetipo nobiliario. En efecto, el típico caballero del Medioevo occidental (el chevalier), rudo y abocado a la guerra, parecía dar paso al cortesano renacentista, delicado y abocado a las artes amatorias. Sin embargo, en las diversas formas de arte de la época, se percibe al cortesano acorde con el espíritu medieval que le otorgó sus características originarias al caballero tradicional: éste es, el que lo representa como un jinete acorazado, montado sobre un poderoso caballo. De aquí deriva la pregunta: ¿el cortesano fue una figura social novísima o simplemente un aggiornamento de la representación usual del caballero medieval? El siguiente trabajo, que ahondará en la obra de Castiglione ya mentada, busca enfatizar la teoría que expresa que no fue ni una ni otra, sino una construcción intelectual a medio camino entre dos concepciones diferentes acerca del papel de la nobleza. Estas son: a) aquella que definía a las jerarquías nobiliarias como las principales ejecutoras de la violencia legal emanada de los poderes de gobierno, propia del Medioevo, y b) la que las concebían como una parte imprescindible del aparato cultural del entorno real absolutista.
Texto completo
Creative Commons
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.
Para ver una copia de esta licencia, visite https://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/deed.es.